jueves, 15 de octubre de 2015

"El libro no es un producto más"

«El libro no es un producto más. Y si esto se olvida se olvida la primera y más importante lección. No existen los milagros, aquí hay que tener mucha paciencia y perseverancia, las ideas de hoy fructifican a los dos o tres años, y se necesita mucha humildad porque uno se está equivocando siempre.

»Por otra parte, para mí el trato con el autor es el aspecto más fascinante de la edición, aunque esta relación puede resultar muy conflictiva. Los editores somos extraños personajes entre el lector y el escritor, y en el fondo nadie entiende cuál es nuestra verdadera función. Decía Umberto Eco que un autor debería ante todo intentar hundir a su editor y a nosotros no se nos oculta este aspecto, que se extiende a toda la cadena de personajes que intervienen en torno al libro. Aun así, no conozco a ningún editor que no esté enamorado de este trabajo.»